Arte, Rentabilidad, Trascendencia, Estabilidad

En un momentum como el que vivimos, donde todo es tan acelerado, donde estamos tan ocupados, que a medida que la vida se vuelve más rápida, el arte tiene que durar cada vez más.

Uno de los sectores más rentables para inversiones a largo plazo es el arte y en la actualidad se caracteriza también por ser un mercado que ofrece diversas opciones a los interesados. Desde la clásica pintura, escultura, fotografía, arte étnico, artefactos culturales; reafirmando a los antiguos maestros o apoyando a nuevos artistas emergentes, y el creciente interés y desarrollo de arte obras digitales generadas por software o inteligencia artificial, u otras representaciones digitales como los NFTs, el arte tiene un gran potencial en tu estrategia de diversificación de cartera.

Daniel Blanco, coleccionista de arte, fundador y director de la galería ArtMafia, explica que el primer valor que tiene una pieza de arte, por ejemplo, es el tiempo y el talento del artista, y es durante un periodo de crecimiento y de madurez -tanto del que ejecuta como de la propuesta artística que hace-, que la obra va tomando también un valor en el mercado: “Y a partir de ahí el valor empieza a subir conforme a la oferta y la demanda. Yo soy un fiel creyente de que el valor de la obra de un artista, de una firma, tiene que ir subiendo de manera conservadora. No puede hacerlo de una manera irreverente o rápida a menos de que haya habido algún suceso muy importante”.

El horizonte para los inversionistas en arte o fondos de arte es prominente siempre que se esté bien documentado sobre la categoría en la que desea incursionar como inversionista, el sector ofrece innovación, accesibilidad, interactividad, una experiencia única con los espectadores -con lo que aumenta su atractivo y valor-.

“Es una buena inversión también el comprar obra de artistas vivos, así vas a apoyar a una carrera y por más que este artista vaya comenzando, si te gusta, si es un artista que tiene tiempo completo y está persiguiendo metas; pues ahí es donde se puede pegar como decimos los coleccionistas un home run. Porque si tú compraste una obra de este artista hace diez años en cinco mil pesos -por decir un número-, y ese artista a través de su carrera expuso, y por estar en situaciones, en el momento adecuado, con la gente adecuada, esa pieza hoy puede costar medio millón de pesos o dólares. Entonces ahí es donde al haber apoyado a un artista emergente, atinaste a una carrera floreciente, es ahí donde tu inversión se puede ir a por los cielos”, comparte Daniel Blanco sobre su experiencia como inversionista en el arte.